Por Oliver Griffin, Reuters
BOGOTÁ
EnergiesNet.com 07 07 2022
Las autoridades venezolanas facturan «frecuentemente» a las compañías petroleras colombianas por la contaminación causada por las fugas de crudo de un oleoducto que discurre junto a la frontera que comparten los dos países, dijo esta semana una organización alemana sin ánimo de lucro en un informe.
Los oleoductos colombianos, gestionados por Cenit, una filial de la petrolera mayoritariamente estatal Ecopetrol (ECO.CN), están plagados de bandas criminales que roban miles de barriles de crudo al día para fabricar pategrillo, una gasolina rudimentaria utilizada para fabricar cocaína.
Las válvulas ilícitas instaladas en el oleoducto Cano Limón-Covenas para desviar el crudo se caen con facilidad cuando se bombea el petróleo a lo largo de la infraestructura, según el informe de la fundación Friedrich-Ebert-Stiftung, lo que provoca derrames que contaminan los ríos que desembocan en el lago de Maracaibo, en Venezuela.
«Las autoridades venezolanas envían con frecuencia facturas a las empresas colombianas responsables de la infraestructura petrolera», añadió el informe.
Reuters no pudo verificar de manera independiente que las facturas fueran enviadas o pagadas. Ecopetrol no respondió inmediatamente a las solicitudes de comentarios. El Ministerio de Minas y Energía declinó hacer comentarios.
Cenit no comentó si había recibido facturas de las autoridades venezolanas, o si las había pagado, pero insistió en que operaba con los más altos estándares.
«Las afectaciones, incluyendo las válvulas ilícitas para el robo de hidrocarburos, son causadas por terceros», dijo la empresa a Reuters en un comunicado.
Los ministerios de Petróleo y de Comunicaciones de Venezuela no respondieron a las preguntas. Tampoco lo hizo la petrolera estatal PDVSA.
Imágenes vistas por Reuters tomadas en la región colombiana del Catatumbo, por donde pasa el oleoducto Cano Limón-Covenas, muestran la contaminación de petróleo en los ríos.
Las frías relaciones entre Colombia y Venezuela dificultan la capacidad de las autoridades para limpiar los daños causados por los derrames de petróleo, dijo a Reuters Bram Ebus, criminólogo holandés y uno de los autores del informe.
«Desde el punto de vista ecológico, el restablecimiento de las relaciones diplomáticas es crucial», dijo, lo que hace esperar que el presidente colombiano de izquierda Gustavo Petro pueda estar más dispuesto a discutir estos temas que el gobierno actual.
Los robos en el oleoducto de Colombia alcanzaron un máximo de seis años en la primera mitad de 2021, según una investigación de Reuters, ya que los grupos criminales buscaban reemplazar los suministros cada vez más escasos de gasolina venezolana de contrabando para su uso en el tráfico de drogas. leer más
Información de Oliver Griffin; información adicional de Mayela Armas en Caracas Edición de Marguerita Choy. Traducción de Elio Ohep, Editor EnergiesNet.com
reuters.com 05 07 2022