• La petrolera recicla su propio carbono para bombear más crudo
• La captura de carbono forma parte de la expansión del gas natural en aguas profundas

Peter Millard, Bloomberg News

RIO
EnergiesNet.com 02 06 2023

Petrobras, el gigante petrolero brasileño controlado por el Estado, está capturando y almacenando una cantidad creciente de dióxido de carbono bajo el lecho marino en una estrategia que le ayuda a aumentar la producción de petróleo y gas natural. También lo llama ecológico.

La empresa está aplicando esta estrategia en tres yacimientos petrolíferos gigantes situados a 230 kilómetros de la costa de Río de Janeiro. Allí, Petrobras utiliza membranas especializadas para separar el CO2 del gas natural que se produce como subproducto de la extracción de petróleo. A continuación, inyecta el carbono en el yacimiento.
Petrobras, el gigante petrolero brasileño controlado por el Estado, está capturando y almacenando una cantidad cada vez mayor de dióxido de carbono bajo el lecho marino en una estrategia que le ayuda a aumentar la producción de petróleo y gas natural. También lo llama ecológico.

La empresa está aplicando esta estrategia en tres gigantescos yacimientos petrolíferos situados a 230 kilómetros de la costa de Río de Janeiro. Allí, Petrobras utiliza membranas especializadas para separar el CO2 del gas natural que se produce como subproducto de la extracción de petróleo. A continuación, inyecta el carbono en el yacimiento.

Petrobras destaca la reinyección de CO2 en su informe sobre el cambio climático
El productor petrolero aspira a 80 millones de toneladas en 2025

Toneladas acumuladas de C02 reinyectadas

Sin embargo, en su último informe de sostenibilidad, Petrobras destaca cómo el programa de captura de carbono reduce la intensidad de las emisiones, es decir, la cantidad de gases de efecto invernadero emitidos por barril de producción. También menciona la captura de carbono como uno de sus principales logros en tecnología verde. A finales de la década de 2000, Petrobras desarrolló esta tecnología como la forma más viable de llevar el gas desde el medio del océano hasta los usuarios finales en tierra.

La inyección de carbono puede tener un impacto neto positivo en el clima si el carbono se captura de la atmósfera o de fuentes industriales, en lugar de reinyectar CO2 que ya estaba en el suelo. Esto último, sin embargo, es lo que se utiliza ampliamente en la industria petrolera para aumentar la extracción de combustibles fósiles.

Las políticas brasileñas que rigen las operaciones con combustibles fósiles también obligaron a Petrobras a actuar: Quemar o ventear el CO2 separado del gas natural infringiría la normativa brasileña. Para llevar el gas natural a tierra y evitar la corrosión de sus gasoductos, Petrobras tuvo que encontrar una solución técnica.

En respuesta a las preguntas, Petrobras aclaró que no está incluyendo el programa de reinyección de carbono -conocido como captura, utilización y almacenamiento de carbono- como parte de su reducción neta de emisiones o como una fuente potencial de créditos de compensación de carbono. Sin embargo, la empresa destaca que planea reinyectar 80 millones de toneladas de CO2 acumuladas entre 2015 y 2025 como un gran avance en sus compromisos climáticos.

«Tenemos el mayor programa de reinyección de CO2 en alta mar del mundo», afirma en su informe sobre cambio climático.

Petrobras cuenta con dos gasoductos en los que se utiliza la captura de carbono para limpiar el gas natural procedente de los yacimientos de aguas profundas y espera poner en producción un tercer gasoducto el año que viene. Esto podría aumentar el suministro hasta en 21 millones de metros cúbicos al día y aliviar la dependencia de Brasil de las costosas importaciones de gas natural licuado de Bolivia, que se ha convertido en un proveedor poco fiable de este combustible para centrales eléctricas.

Petrobras produce petróleo comparativamente bajo en carbono, tanto por la cantidad de energía utilizada para producirlo como por la composición química del propio petróleo. Un solo pozo en la región del presal de Brasil puede producir más de 50.000 barriles al día, mientras que se necesitan más de 5.000 pozos para producir la misma cantidad en la famosa Cuenca Pérmica de Texas. Esto significa que en Brasil se necesita menos energía y emisiones para producir la misma cantidad de petróleo. Esto se debe en parte al uso que hace la empresa del C02 para aumentar la eficiencia de sus pozos.

Aunque muchos productores se esfuerzan por reducir la contaminación in situ, la mayor parte de las emisiones de gases de efecto invernadero de un barril de petróleo se producen cuando los consumidores lo queman para transporte o energía.

Petrobras también afirma que más de una década de experiencia en la reinyección de CO2 le ayudará a adentrarse en nuevos tipos de almacenamiento de carbono, como la captura de emisiones de las refinerías y su posterior almacenamiento en campos petrolíferos clausurados, que serían una fuente potencial de créditos de carbono. La industria petrolera ha venido impulsando proyectos de captura y almacenamiento de carbono como forma de contrarrestar sus emisiones. Occidental Petroleum Corp. está capturando carbono de la atmósfera e inyectándolo en yacimientos petrolíferos como parte de un plan que, según afirma, acabará haciendo que su crudo tenga cero emisiones netas.

Otras grandes petroleras han encontrado dificultades para hacer funcionar la captura de carbono. El proyecto de captura y almacenamiento de carbono de Chevron en Australia, Gorgon CCS, sólo está inyectando un tercio del carbono que debería y le quedan años de trabajo por delante para alcanzar su plena capacidad. El proyecto se diseñó para capturar 4 millones de toneladas de C02 al año procedentes de una planta de gas natural licuado y almacenarlo en un depósito submarino.

La captura de carbono tendrá que crecer hasta alcanzar el cero neto en 2050 si el mundo quiere evitar un calentamiento superior a 1,5C, según numerosas líneas de investigación. Si bien se invirtieron más de $ 7 mil millones en proyectos de captura de carbono entre 2018 y 2021, más del 70% de todo el CO2 capturado se está utilizando para la recuperación mejorada de petróleo, dijo BloombergNEF el año pasado en un informe de investigación. El informe también dijo que el uso de la captura de carbono por parte de las empresas de combustibles fósiles para la extracción de petróleo durante más de 30 años ha contribuido a la falta de aceptación social de la tecnología.

bloomberg.com 01 06 2023