Daniel Guerrero, Bloomberg Línea
BOGOTÁ
EnergiesNet.com 28 12 2023
“Hay que poner la plata donde ponen la boca”, fueron las palabras que usó Carlos Garibaldi, secretario ejecutivo de la Asociación de Empresas De Petróleo, Gas y Energía Renovable de América Latina y el Caribe (ARPEL) para referirse a que las grandes potencias económicas no han invertido en las energías limpias y en la transición energética tanto como han dicho que están dispuestos a hacerlo, aunque no quiso hacer referencial puntual de ningún país.
En América Latina los países han entrado desde hace ya varios años en una etapa de transición de los combustibles fósiles hacia las energías renovables. Para ello, las empresas tradicionales del sector de energía han empezado a incursionar en los desarrollos de nuevas tecnologías que permitan reverdecer las matrices energéticas de cada país.
Garibaldi asegura que “es una transición que tenemos que hacer de la mano con el petróleo y el gas, lamentablemente”, y explicó, que los países con grandes oportunidades en la industria de combustibles fósiles, “tienen derecho a explotar sus recursos”.
El secretario ejecutivo de ARPEL advirtió que es viable la coexistencia de las dos industrias y puso como ejemplo a Brasil porque “tiene la matriz energética más verde de la región y es un jugador fuerte del sector petróleo y gas”.
Incluso, Garibaldi también pone como ejemplo a empresas estatales como Ecopetrol o YPF, que han entrado en la ejecución de proyectos de gas, solares y de hidrógeno azul y verde como parte de esas transiciones de las naciones hacia las energías limpias.
¿Dónde está la plata para energías limpias?
Aunque Garibaldi reconoce que las energías limpias vienen creciendo en cuanto a niveles de inversión, asegura también que los flujos siguen siendo inferiores a los necesarios para poder cumplir las metas planteadas para 2050.
“A las empresas no les gusta invertir a pérdida”, dice Garibaldi como una de las razones por las que la inversión es insuficiente, aunque aclara que las energías renovables están alcanzando niveles de rentabilidad que, “en algunos casos, son similares a la industria de los hidrocarburos”.
Pero, además, advierte el secretario de ARPEL que la inversión puede desviarse a otros sectores ante la falta de políticas de estado y la falta de regulación y de condiciones para que los países sean atractivos.
Para Garibaldi es una industria que requiere el compromiso de inversiones tanto del sector público como del privado y que, también, necesita de inversiones locales y extranjeras, sin embargo, enfatiza en que para atraer esa inversión es necesario que existan garantías de derechos contractuales, y por eso cree que “no conviene que haya vaivenes ideológicos y caprichos de los gobiernos”.
Falta compromiso del norte
La transición energética, el calentamiento global y en general, la necesidad de reverdecer la economía ha sido un tema de debate en los encuentros del FMI, Banco Mundial, Davos, y en todos se han alcanzado acuerdos y compromisos de inversión.
Sin embargo, Garibaldi asegura que esos, y otros compromisos, no han llegado a feliz puerto porque han terminado siendo incumplidos.
“Hay que poner el dinero en donde está la boca”, repitió Garibaldi, quien explicó que hablaba de “los países del norte global han hablado de poner X millones al año y esos flujos no se materializan”.
Energía verde seguirá creciendo
Si bien las inversiones están siendo insuficientes para cumplir con las metas a 2050, Garibaldi no ve un camino distinto a que sigan ganando participación dentro de la matriz energética.
“En el futuro dos tercios de la energía va a ser de renovable”, pero insistió en que hay que acelerar porque no se van a cumplir los objetivos climáticos.
Sobre los planteamientos que se han hecho desde Colombia, primero en el Gobierno de Iván Duque y ahora bajo la dirección de Gustavo Petro de cambiar deuda por acción climática, Garibaldi se mostró eséptico.
“Es una excelente idea, pero no sé qué tan viable es, igual, al final del día no es tanto un problema de oferta sino de demanda”, aseguró el secretario de ARPEL.
Países como Colombia han decidido desmontar los incentivos tributarios para las energías renovables, sin embargo, para Garibaldi “son esenciales. Hay que seguir apoyando hasta que sean económicamente eficientes”.
Sin embargo, teniendo en cuenta las realidades fiscales de cada país, el ejecutivo de ARPEL considera que “cada estado deberá calcular cuánto puede invertir en incentivos”.
A pesar de que cree que aún se necesitan ese tipo de “ayudas”, también considera que la industria de renovables está a punto de “destetarse” porque sus costos intrínsecos están bajando a medida que aumenta la escala.
bloomberglinea.com 27 02 2024